La Fundación Ambientalista Panda realiza una gran obra en nuestra ciudad y en el departamento de Colonia en materia de cuidado ambiental, que se cristaliza, entre otras acciones a través de movidas bien conocidas como la limpieza de costas o la colocación de los denominados puntos verdes para depositar botellas plásticas. Acerca de esta loable tarea, dialogamos con su director Adrián Giraudo.
Sobre la historia de Panda contó: «Ya son 30 años de trabajo constante, empezamos en el 92, nuestros comienzos están originados en la educación, nuestro incentivo mayor fue siempre tratar de cambiar conciencias colectivas en la sociedad y es algo que la única manera de lograrlo es a través del recambio generacional, esto se hace a través de un trabajo educativo donde a través de ese recambio generacional, los niños de hoy van a tener mayor capacidad y mayor conocimiento cuando a ellos les toque ser padres, cosa que no nos ocurrió a nosotros, nosotros no teníamos eso, por lo menos no era visible, hoy por hoy si, la problemática es visible, internet ha ayudado muchísimo, y hoy estamos viviendo esos cambios, lo vivimos en carne propia, lo sentimos, las sequías, las inundaciones, sentimos lo que antes no, eso ha hecho también que tanto las instituciones como organismos oficiales, los ministerios se hayan preocupado más, las empresas empiecen a tener una injerencia con mayor responsabilidad, cosa que todavía cuesta porque hay empresas que están muy comprometidas con la causa ambiental, y otras a las que sólo les interesa que su principal labor sea el lucro, que los números cierren y nada más», comenzó diciendo.
Luego agregó: «Hay que reconocer la realidad y tratar de ir modificándola con la paciencia y la constancia que eso conlleva. Nuestra visibilidad en el campo educativo, tenemos una referencia importante con el Ministerio de Educación y Cultura, y con el Ministerio de Ambiente, con este ya va a ser el decimotercer año que hacemos la limpieza de costas, y esto lo habíamos hecho desde la educación, ahora en el año 2019 que comenzamos con la tarea de gestión de residuos que para nosotros fue un desafío, porque veíamos que había una incoherencia entre el discurso y la realidad cotidiana, entonces nos metimos, de corajudos, y no hemos podido parar desde que comenzamos hasta ahora, porque ahora con el diario del lunes, yo puedo encontrar una explicación, cuando comenzamos en el año 2019, sinceramente no sabíamos por qué», reflexionó.
«Comenzamos con 10 y hoy tenemos más de 220 puntos verdes»
Acerca del proyecto de la recolección de residuos comentó: «Comenzamos con 10 puntos verdes, esos bolsones colocados en los armazones con una interacción con la intendencia de Colonia, ellos nos lo facilitan para que nosotros coloquemos los bolsones, y así hicimos en los 10 institutos educativos que existen en Colonia del Sacramento, entre primaria, secundaria, privadas y públicas, y ahí comenzamos nuestra tarea a través de esa recolección primaria, y vimos que funcionaba porque si a los chicos vos les explicás, son militantes, y dijimos, bueno, es por acá el camino, ellos lo transfirieron a sus familias y empezaron a llovernos los pedidos, en residencias, complejos habitacionales y luego comenzamos en sanatorios, policía, clubes, en estaciones de servicios, supermercados, comenzamos con 10 y hoy tenemos más de 220 puntos verdes, y la gente sigue pidiendo», contó. Sobre la concientización en los más pequeños, explicó: «Cuando le hablo a los chicos en las escuelas, les comento: `ni siquiera lo que yo les digo es verdad absoluta ́, tienen que procesar todo, algo les cae bien, algunas cosas las cuestionarán lógicamente, porque cuando éramos chicos lo que decía el profesor era palabra santa, o lo que dice un médico, hay que confiar, pero hay que pensar si lo que me está diciendo tiene lógica, eso es muy importante para la concepción de los chicos, porque si ese proceso se cumple y te convence, seguramente lo lleves para toda la vida, que no sea forzado», señaló.
En relación de cuántos trabajan junto a él en la fundación dijo: «Nosotros somos unas 6 personas fijas y 200 movibles, porque en la limpieza de costas tenemos 200 voluntarios cada año, y conseguir 200 voluntarios en una localidad no es fácil, van fluctuando y está bien que así sea porque no todo el mundo tiene la disponibilidad de ir ese día, pero lo importante es que van y ellos ya son nuestros multiplicadores ambientales, así se llama nuestro programa, el efecto multiplicador es muy im- portante», dijo.
«La hemos remado toda la vida, esto se hace más por convencimiento o por convicción que por comercio»
Acerca sobre el financiamiento de Panda, Giraudo respondió: «Es importante esa pregunta porque mucha gente tiene errores en la concepción, porque mirando sin saber es muy fácil opinar y quizás hay gente que piensa lo que no es y está bueno que lo podamos aclarar, nosotros desde hace 32 años, fuimos una ONG ahora somos una fundación pero la hemos remado toda la vida, esto se hace más por convencimiento o por convicción que por comercio, no nos sustentamos, todos los meses, si llegamos es con lo justo, es una lucha constante, no nos sobra nada, tenemos que andar luchando siempre, acá los productos que nosotros traemos a la planta los clasificamos con el personal, hay que pagar impuestos, personal, alquileres, las cuotas que nos metimos en un elevador hace poco, cargábamos a mano hasta hace un mes eso era una sangría, parecíamos unos cavernícolas», señaló.
En relación al tema abundó: «No tenemos una empresa atrás que nos ayude para que estemos tranquilos, esto es todo a pulmón, tratando de llevar a los recicladores oficiales, la materia prima que ellos necesitan y que nos la paguen al mejor precio cuando el precio este año bajó el 40% en el caso de los plásticos por ejemplo, entonces cómo hacer cuando te manejan los valores del mercado, no tenemos chance», aseveró.
Luego agregó: «Yo estoy muy contento de lo que hago, no me gusta llorar, pero si que estamos al filo de las cuentas, nunca podemos ahorrar un peso, pero nos fortalecen los chicos, cuando vamos a las escuelas, tenemos un saludo entre ellos y nosotros, que es el signo con los brazos cruzados, el símbolo de multiplicar que es nuestro lema, de nuestro programa, nos hace muy felices el saludo al camión, eso nos motiva, estimula y reconforta», expresó Girauda.
«En 5 años hemos evitado que unos 6000 camiones vayan al vertedero»
En torno al relacionamiento con los organismos estatales, informó: «En cada caso tenemos informes porque por ejemplo con la limpieza de costas nosotros tenemos un conteo de la basura que juntamos, qué tipo de basura, eso se clasifica todo, hasta las colillas de los cigarrillos, aunque no nos dedicamos a eso, sí tenemos la clasificación de los plásticos, los cartones, aceite de cocina usado, todos materiales reciclables, ahora empezamos con neumáticos, a través de NFU, neumáticos fuera de uso, en conjunto con el Ministerio de Salud, estamos tratando de armar una logística para todo el departamento, los organismos pueden ayudar y mucho y aparte es necesario que se comprometan con el cuidado del ambiente», sostuvo.
Escribe: Juan Prandi
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