Tanta riqueza humana es imposible de disimular… mi cariño eterno a una institución que me adoptó y supo cobijarme durante tantos años… de la mano del Oreja, el Chupao’, el Tito, Zurbrigg, el Caballo, el William… así fueron mis comienzos y heredé la responsabilidad de cuidar a los que venían creciendo, el Pita, el Pata, el Peluca, el Lolo, Cachito, Martín, Miguel, el Fito y vaya si puedo seguir nombrando amigos. No sé que será de mi vida pero al Progre le deseo que sea eterno.
Néstor Pedreira. Pte del C.A. Progreso. 17 de enero de 1959 – 17 de enero de 2024.